Pues yo siempre he sido, sin saber lo que era, del HUM, porque me hacía todo lo que podía.
La primera vez que mostré interés por escuchar música, fueron los 40 Principales, que mi hermana escuchaba en la radiocasete mono National Panasonic (que tengo aquí al lado) y nada más cogerla, le rompí la antena. La que me dió mi hermana.... todavía me acuerdo
Con el tiempo y dado que tenía un tío con una trapería, pues le rebañaba todos los altavoces de tele, radios, etc etc, que le llegaban y con los tableros que me encontraba en las escombreras hacía "cajas acústicas". Solo hacía una unidad (escuchaba en mono jejejej) y el filtro, pues un condensador para los agudos y a rular. Recuerdo que hice una con las puertas de formica verde de la cocina de mi casa, cuando las cambiamos, con un grave de 8", un medio de unas 4" y un agudo rectangular (altavoz de una tele) que sonaba de maravilla. Los mejores agudos que recuerdo haber logrado de jóven. Esta caja la llevaba a las fiestas con los amigos, junto con el Panasonic, que tenía salida jack para conectarle.
Más tarde le encargamos a mi madre una radio estéreo y un día que fue a Sevilla al médico se vino cargada con ella. Las instrucciones eran claras: "Mamá, una radio con la casete en medio y A CADA LADO un altavoz grande con 2 chiquititos encima de los grandes. Y que sea barata, claro"
Se trajo una Sanyo por 14.000 pelas y los altavoces chiquititos resultaron ser los micrófonos de grabación. Cagónla, que decepción me llevé. Para colmo no tenía salidas para enchufarle cajas externas, así que se las puse yo jejejeje, por lo que tenía que hacer las cajas de 2 en 2 y era un problema encontrar altavoces iguales en la trapería.
Recuerdo cuando tuve mi primer woofer de "pistón libre", o sea, con goma como suspensión en vez de todo de papel. Lamentablemente estaba casi quemado y me duró solo unos días. A partir de ahí y ya con algún dinerillo los fuí comprando en Sevilla. Elecinsa era la marca y filtros Beyma. Las tablas ya las compraba en la carpintería.
Por aquel entonces mi hermana se había comprado una minicadena Inves100, con tocadiscos, doble pletina, radio y eq. Aquello sonaba bien pero a mi me sabía a poco. Obvio, me acostumbré a visitar la Expoelectrónica de ECI y allí se me caía la baba.
Vi en una tienda un ampli Brigton en aluminio, con unos led que se movían con la música. Me enamoré de él y fui a comprarlo. Me costó 10.000 pelas y cuando llegué a casa ni se encendía. Lo había comprado estropeado. Tuvo que ir mi madre a la tienda a ponerse seria con el tío y me lo arreglaron, que 10.000 pelas era mucho dinero.
A partir de ahí y con el dinerillo que iba ganando de ayudar a mi padre en diversas tareas, me fuí agenciando el sistema Pioneer por componentes que aún conservo (ampli, eq, pletina, tuner, plato) junto con las cajas Vieta BD5100 de 3 vías con altavoces con papel blanco, que era la moda.
Menuda tralla le daba a ese equipo, ufff como he disfrutado con él. Mi hermana me regaló el cd Pioneer que hoy en día es el que tengo. Además ella se compró casi lo mismo que yo, pero de una generación posterior y aun lo conserva todo funcionando.
Cuando me casé me pasé al Dolby Prologic junto con el video estéreo y el ampli Pioneer con decodificador más un central Keenwood y satélites Jamo.
Luego ya vienieron las Elac, los Onkyo, el CEC con el Unison, las AR5... hasta lo que tengo ahora, en activo.
Hay muchas cosas que he tirado o vendido, pero conservo buena parte de ellas, casi todas funcionando.
Siempre tengo buenísmos recuerdos que muchas vivencias, ocurrencias, inventos y pruebas que hacía.
Por ejemplo, "hacía" altavoces de agudos con los altavocillos de los transistores, a los que le echaba supergen por detrás. Como no se podía mover, pues por cojones solo reproducían agudos... pero pésimamente, claro.
Me llegué a fabricar unos auriculares con esos altavocillos y unas tarrinas de plástico y me los tenía que sujetar con un "barbuquejo" de goma pues se quedaban abiertos y no sonaban bien. De ahí mi predilección por los "cascos cerrados"
También arreglé un altavoz "bueno" (por el aspecto era bueno) de papel que estaba roto por la suspensión. Lo arreglé con cera de una vela derretida sobre la raja. Parece mentira, pero quedó arreglado y no hacía ruído de la roruta.
En fin, bonitos recuerdos, como digo.
Saludos.
José Luis